El scalping consiste en llevar a cabo pequeñas operaciones durante un periodo de tiempo muy breve. Lo más habitual es que estas operaciones sean de uno, dos, cinco o como máximo quince minutos cada una.
Con cada operación que se lanza, el margen o spread entre la compra y la venta no es muy elevado, por lo que al cerrar cada operación se van asegurando las ganancias, por poco elevadas que sean o, por el contrario, se asumen pérdidas poco significativas. Por lo tanto, a lo largo del día se pueden hacer muchas operaciones sin asumir elevados riesgos.
Se supone que es mucho más fácil prever las pequeñas variaciones de precios en el mercado que las grandes, de ahí que poco a poco se vayan sumando más adeptos a esta práctica.
Para poder llevar a cabo debidamente el scalping, es básico conocer cómo funciona el Forex, ya que algunos dirían que es una de las estrategias más efectivas en dicho mercado, aunque no todos los traders están dispuestos a hacerlo, puesto que supone dedicar mucho tiempo por unas ganancias muy pequeñas.
Índice
¿Quién puede hacer Scalping?
En realidad cualquier persona que pudiera dedicar bastante tiempo a operar podría llevar a cabo esta estrategia, pero lógicamente no todas lograrían buenos resultados.
El nivel de estrés en estas operaciones tan rápidas es muy alto, y hay que estar preparado para poder gestionarlo sin que ello acabe produciendo un problema de salud.
Además, es aconsejable no tener un perfil conservador puesto que, como en todo lo relacionado con la inversión on-line, se puede ganar o perder y siempre hay que asumir los riesgos.
Y, por supuesto, el autocontrol es fundamental. En todo momento se debe mantener la estrategia marcada desde el inicio, que debe ser clara y bien definida tras hacer un análisis de los mercados y saber hacer un buen uso de los «stop-loss» para que, llegado el momento, se pueda cerrar la operación a tiempo. Y todo esto, de forma rápida y veloz porque hay que recordar que el tiempo del que se dispone es muy poco.
Acción reacción, pensar, predecir y actuar simultáneamente: en eso consiste el scalping.
¿Cómo hacer que el scalping sea rentable?
Como ya hemos mencionado, estas operaciones aportan unos beneficios poco elevados, así que hay tener en cuenta varios factores para que al final, sea lo más rentable posible.
En primer lugar, se debe tener claro el coste de la plataforma que se está utilizando, ya que normalmente los programas que se usan para llevar a cabo el scalping tienen coste, además de las comisiones de gestión y mantenimiento de la cuenta, las que aplique el proveedor por ejecución y liquidación de las operaciones, los cánones de mercado, etc.
No es fácil hacerse de oro con el scalping, incluso hay quienes utilizan este sistema para generar unos beneficios que posteriormente puedan re-invertir en otros valores, sin miedo a asumir perdidas personales.
La necesidad de limitar pérdidas con los stop-loss
Las operaciones de scalping son muy rápidas y, además, podemos llevar a cabo tantas como queramos a la vez. Y esto supone una ventaja y también un inconveniente. Lo que recomiendan los expertos es que simultáneamente se gestionen de 3 a 4, no más, pero si por la razón que se crea conveniente se llevan a cabo más, es fundamental conocer bien los stop-loss y sus tiempos.
Los stop-loss son un buen salvavidas ya que, si se gestionan bien, pueden eliminar el riesgo de tener pérdidas significativas y limitan el capital invertido. Por ello, sería conveniente fijar un stop loss para cada operación que iniciemos, especialmente si se están usando diferentes divisas a la vez.
Categorías de Scalping
Existen, fundamentalmente, tres tipos de categorías en las que se engloban todas las estrategias de scalping que se pueden seguir:
- La primera se basa en rangos, o contratendencias, y en ella se aprovecha la fluctuación rápida del mercado.
- La segunda está basada en el tiempo. Ésta se fija en la rotura de rangos de apertura o en las que usan horas exactas de GMT para abrir operaciones.
- Y, como última, la «Trendfollowing«, que utiliza estrategias para identificar y aprovechar los retrocesos en las tendencias.
Cada una de estas categorías engloban otro tipo de estrategias para poder llevar a cabo operaciones de scalping.